Recordar es vivir... bueno eso dicen, pero a mi edad y con
las frustraciones y faltantes del tiempo, no dan ganas si no de volver aquellos
inolvidables momentos donde la vida se trataba de jugar y sumergirse en
aventuras y competencias de niños.
Allí donde los sueños eran fácilmente alcanzables y los
complejos no eran impedimento para ser autentico. allí en medio de una familia
cundiboyasence quienes con esfuerzo cubrieron mis necesidades más que básicas
en medio de una pobreza ruda.
Allí estaba yo en brazos de mi madre biológica quien según
me cuentan estaba muy mal económicamente, y ya existía mi hermano menor, así
que un día dijo la llevare donde la señora Carmen para que me la cuiden
mientras trabajo.
Pasaron días y años y para cuando volvió yo tenía 3 años y
no me habían registrado así que, con la excusa de celebrar Halloween, pidieron
permiso y me llevaron a registrar, me devolvieron y a los 17 años le volví a
ver, pero no por que quisiera saber cómo estaba si no que necesitaba dinero
para sacar a mi papa y hermano de la cárcel. recuerdo que mi mama adoptiva le
ofreció sopa de pajarilla, y arroz. Yo entre tanto subí al tercer piso de mi
casa impactada por tan desagradable momento. cinco años después, mi hermana
menor me llamo para decirme que mi mama estaba muriendo de cáncer y que quería
verme antes de morir debo ser sincera y reconocer que no me gustó la idea de
tener que ir a verla. el domingo siguiente fui con mi mejor amiga quien siempre
me ha acompañado en todas mis aventuras de vida que no han sido pocas, y así me
sentía más segura y de alguna manera protegida.
recuerdo haber cruzado su cuarto y sentarme en una vieja
cama y ella sentada en su mecedora con mirada arrogante en algunos momentos, me
pidió perdón, yo en cambio tenía muchas preguntas y reclamos en mi corazón, no tenía
la madurez suficiente para enfrentar este momento tan incomodo así que solo la
deje hablar, cerca de las 5 pm regrese a casa y a los 15 días ella murió. por
primera vez en mi vida sentí que de verdad no tenía madre, pero siempre existe
una luz y mi madre adoptiva llena todo vacío, ya que ha dado todo por mí y es a
quien amo y respeto como a nadie así que sea cual sea nuestra situación la vida
siempre repone alguna perdida no solo con personas si no entregándonos conocimiento
y experiencia a lo largo de nuestra vida para guiar a otros teniendo nuestra
vida como ejemplo.